miércoles, 29 de octubre de 2008

Telaraña


Algo me imposibilita el movimiento,
una telaraña hilvanada por los recuerdos, me rodea por completo.
Los rayos del sol dejaron de visitarme,
no es posible distinguir, en esta oscuridad profunda que me envuelve.
El silencio se ha hecho cotidiano.
Desde hace algunas noches, he dejado de mirar el tiempo.
En el laberinto de mi memoria, a veces, los recuerdos más lejanos
se presentan ante mí, como si fueran ahora.
Estos hilos que me atrapan, me infectan y me absorben
al centro de esa perfecta telaraña.
Tu tela envolvente rodea mi alma imperfecta
y mi corazón te extraña, pero ya no te desea.
Entre tu y yo solo queda silencio.
Quizás, si llego al centro del laberinto
pueda conocer al rey de corazones.
¡Que le corten la cabeza!



2 comentarios:

Anónimo dijo...

creo sinceramente que el rey de corazones terminará por caer en su propia telaraña, con la que atrapa a todas, las que creemos que nos ama. saludos

Anónimo dijo...

Yo tambien me he sentido en muchas ocasiones atrapada por la telaraña, esa sensación que parece que te ahoga, que crees que es amor y solo es poder. Saludos.