Bitácora

Pensando en voz alta, en un descanso de este domingo de trabajo, mientras se enfría el café:
Al día son unos minutos de dedicación.
Sigo leyendo noticias y correos de otros blogger, las chispas en mi cerebro se siguen encendiendo, pero a la hora de sentarme frente al PC, algunas veces me faltan las fuerzas, para controlar lo que me gustaría, a veces gritar.
TENGO PROYECTOS MÁS LIBRES Y CREATIVOS, QUE ME PERMITIRÁN SALTARME LAS FRONTERAS DE LA ESCRITURA.
Mi blogs, comenzó probablemente, como una pataleta mía, cuando merodeando en otros blogs, me inspiré en crear el mio, ¿Como? si no sé... pero en este mundo, no me resisto a nada, y un teclado y horas de sueño quitadas, dan para aprender.
Me agrada el resultado, las nuevas amistades creadas y dejar comentarios en otras bitácoras, aunque nunca sabes donde eres bien recibida, y eso lo experimentas, cuando no contestan, pero claro, cuando no hay nada que decir, pues la disculpa hace tiempo que se perdió en el silencio...

Ahora los remordimientos afloran y como comenzar de nuevo, cuando el tiempo se encarga de borrar los recuerdos.

Hoy hecho de menos ir al teatro, los días anteriores acusaba el cansancio, pero hoy.... Como dice mi compañero José, los malos ratos, los sofocos, los nervios se disipan y nos quedan los buenos recuerdos, hemos sido cuatro días, estrellas que han brillado con luz propia, y estas amistades creadas entre largas tardes de ensayos, esas no las borra nadie.
Hemos reído mucho..., hemos llorado, nos hemos enfadado por olvidar algún retazo...
nos hemos sorprendido por lo inventado, hemos perdido la vergüenza de desnudarnos entre bambalinas y se han creado lazos nuevos, para siempre recordados.